Nuestras vidas van a cambiar; y los entornos en los que nos moveremos a partir de ahora, también. Hace años en IPP añadimos a nuestro catálogo la lámina antibacterial, un material que a partir de ahora se va a convertir en imprescindible en lugares como guarderÃas, farmacias, hospitales, residencias de ancianos, restaurantes y otros edificios y espacios públicos donde la higiene será muy importante.
Por todo esto hoy, además de repasar las caracterÃsticas, propiedades y aplicaciones de la lámina antibacteriana, hablaremos de un nuevo material que añadimos a nuestro catálogo: los revestimientos antibacterianos mediante los paneles laminados.
Se trata de una lámina transparente especial de poliéster reforzado que se instala de forma muy sencilla sobre cristales. Su transparencia es total y se puede limpiar muy fácilmente.
Evidentemente su propiedad principal es evitar la propagación de bacterias hasta en un 99% reduciendo el riesgo de contagio, pero tiene otras propiedades añadidas por su composición:
Reduce algunos brillos propios del cristal y protege los cristales de rayaduras o roturas, además de filtrar los rayos uv nocivos para la salud filtrándolos de manera considerable.
Se trata de unos paneles de distintos grosores fabricados mediante láminas de papel prensado a alta presión cuya capa superficial tiene propiedades antibacteriales gracias a la tecnologÃa Nanoguard, un sistema de protección antibacterial y fungicida hecho de nano plata, lo que reduce en menos de 2 horas casi al 100% la presencia de gérmenes, microbios y bacterias de sus supeficies.
Como propiedades adicionales tenemos las que tienen habitualmente este tipo de paneles de láminas prensadas: alta dureza y resistencia al rallado, lo que lo convierte, además, en un material muy fácil de limpiar.
Es un material que lleva años en el mercado y muchos elementos de mobiliario de hospitales, cocinas profesionales y parques infantiles se fabrican en este material.
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